“Quizás reconocer que ‘no todo marcha acorde al plan’ sea más estabilizador que insistir en lo contrario”, planteó el exministro Hernán Lacunza, en un análisis de los aciertos y los problemas que, en su visión, tiene el programa económico desplegado por el Gobierno.
Fue en un mensaje compartido en su cuenta de X (ex-Twitter), donde el exministro de Economía (2019) advirtió por el impacto de la política monetaria y cambiaria y la suba en la tasa de interés.
“Un diagnóstico público certero despertará expectativas de medidas correctivas y bajará la tensión. Pues está claro que la tasa en 70% no será gratuita en términos de producción, consumo y empleo”, escribió Lacunza, sobre el escenario financiero de las últimas semanas.
Su comentario hace referencia a los vaivenes en las decisiones del Gobierno, a las que calificó como “un camino aleatorio, mix de medidas expansivas y contractivas, algo desconcertante”. Se refiere a la sucesión de anuncios que incluyeron subas de encajes, licitaciones de títulos públicos fuera de cronograma, regreso de los pases activos y pasivos, la intervención del BCRA en los futuros del dólar, la compra de dólares ‘en block’ por parte del Tesoro y otras medidas de las últimas semanas.
En su planteo, Lacunza se muestra crítico de la premisa del Gobierno, sintetizada en la frase ‘El dólar flota, no hay emisión, la tasa es endógena, no hay traslado del dólar a inflación’, aunque minimiza los inconvenientes y propone “una sintonía fina” en el plan. “Nada grave, no habrá ninguna explosión. Respecto del desquicio heredado, apenas una sintonía fina”, escribió.
El foco del exministro, que actualmente es vicepresidente de Racing Club, tiene que ver con el objetivo del Gobierno de bajar el tipo de cambio, y la consecuente suba en la tasa de interés que se generó con sus últimas medidas para “absorber excedente de pesos” y controlar la “liquidez” en el sistema.
En su mensaje, Lacunza plantea que sería “estabilizador” un cambio discursivo en el equipo económico, que debería “explicitar” su esquema, al que calificó como “un poco extravagante”.
Eso incluye, plantea Lacunza, reconocer que “la flotación del dólar es administrada (aun dentro de la banda)”, que “la autoridad monetaria provee tasas de referencia (como casi todos los bancos centrales del mundo)” y que “la emisión no es cero porque la demanda de dinero sube por la estabilización (y la ”base monetaria amplia» irrelevante»).
Por último, Lacunza advierte por el efecto del tipo de cambio sobre la inflación, y advierte que “el traslado a precios de una devaluación es menor, pero no nulo (pues en caso contrario el techo de la banda cambiaria sería innecesario)”.
“El problema de la coyuntura se resume a no convalidar una suba adicional del tipo de cambio (que sí estaba atrasado) que se traslade a precios. Nada grave, no habrá ninguna explosión. Respecto al desquicio heredado, apenas una sintonía fina”, concluyó el economista, titular de Empiria.