TEL AVIV.- La exrehén israelí Sharon Cunio, que sobrevivió al cautiverio de Hamas, y cuyo esposo, el argentino David Cunio, lleva 671 días en la Franja de Gaza, dijo al Canal 12 de noticias en Israel que vio un video de su marido cautivo.
La mujer habló del impacto que le causó ver las imágenes que no fueron publicadas. “No puedo entrar en detalles, pero vi un video de su cautiverio, que es muy difícil de ver”, afirmó.
“Nunca había visto a mi marido tan destrozado. Nunca lo había visto así. Se ve muy mal, está muy desesperado y hambriento. Desde que vi los videos, solo puedo pensar en si su estado ha empeorado como el de los demás rehenes”.
En las últimas semanas, se han publicado imágenes desgarradoras de los secuestrados Eviatar David y Rom Breslavsky. “Eran imágenes que no creía que veríamos desde el Holocausto”, declaró Sharon Cunio.
En el programa “Ulpan Shishi” compartió sus sentimientos tras la decisión del gabinete israelí de ocupar toda Gaza. “Decir que ‘estoy destrozada y decepcionada’ ni siquiera describe cómo me siento”, explicó. “Desde el momento en que me desperté esta mañana, tengo el corazón roto”.
“Me abrumaron y me sumieron en la desesperación”, dijo sobre la decisión del gabinete. “No veo cómo se puede salir de esto. Es una sentencia de muerte para David y todos los rehenes que se consumen allí”.
Los ministros afirmaron que no había alternativa a la acción militar aprobada. “Creo que un acuerdo para el regreso de todos era posible; al menos podría haberse iniciado hace dos semanas”, describió. “Las diferencias [con Hamas para alcanzar un acuerdo concertado] eran muy pequeñas. No sé qué creer”.
“Me duele que los ministros ignoren la clara declaración del Jefe de Gabinete pidiendo la liberación de los secuestrados”, dijo Cunio, y se dirigió a la ciudadanía: “Esta no es nuestra lucha privada. Esto es un desastre nacional, no un desastre privado de 50 familias. Les ruego que nos apoyen y luchen con nosotros; lo necesitamos”.
El7 de octubre de 2023, Sharon, entonces de 34 años fue secuestrada por Hamas junto a su marido, sus dos hijas mellizas, su hermana, su sobrina y sus cuñados -incluyendo al otro argentino Ariel Cunio-, en el kibutz Nir Oz. Luego fueron separados hombres de mujeres y niños en Gaza.
Durante el alto al fuego de una semana en noviembre de aquel año, las mujeres y las niñas fueron liberadas, dejando atrás al esposo de Sharon y al cuñado.
Aquel 7 de octubre, alertado por los estruendos iniciales de la operación de Hamas, David corrió hacia la habitación donde Sharon y sus hijas dormían. “Escuchamos los cohetes y nos dimos cuenta de que algo realmente inusual estaba sucediendo”, recordó en su momento Sharon.
Los mensajes de alerta los instruyeron para permanecer en habitaciones seguras con puertas cerradas. “A partir de ese momento, David sostuvo la manija de la puerta durante casi cinco horas”, reveló Sharon. En algún momento, la familia escuchó a terroristas entrar a la casa a los gritos antes de intentar irrumpir en la habitación segura.
En un principio, la pareja logró frustrar a los intrusos, pero luego los terroristas prendieron fuego a la casa. Cuando el humo llenó la habitación tuvieron que decidir entre quedarse y asfixiarse o abrir la ventana: “Cuando la habitación empezó a llenarse de humo y todos empezaron a toser, dije: ‘Tenemos que abrir la ventana y salir’. David se opuso, pero luego respondí: ‘¿Cuál es la opción? ¿Sentarnos y ver cómo nos asfixiamos todos? ¿Morir aquí, lentamente?’”.
Sharon perdió el conocimiento brevemente por la inhalación de humo, y su hermana la reanimó. Fue entonces cuando decidieron abandonar la casa con las manos en alto y fueron capturados.