“Soy una chica, parada frente a una puerta, pidiéndole a los turistas que se vayan”

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En Notting Hill, el encantador barrio del oeste de Londres que enamoró al mundo con Julia Roberts y Hugh Grant caminando entre casitas de color pastel, libros antiguos y mercados de flores, la postal ya no es la misma.

Muchas de aquellas pintorescas fachadas que alguna vez inspiraron escenas de película y miles de fotos en Instagram hoy están siendo modificadas, tapadas, anuladas. Pintadas de negro.

«Un lugar llamado Notting Hill», la película de 1999 protagonizada por Julia Roberts y Hugh Grant

Muchos vecinos hartos de que su calle se convierta en un set de fotografía permanente, decidieron comenzar a oscurecer sus viviendas para alejar a los nuevos curiosos: los influencers. Porque si hay algo que no queda bien en Instagram, es un fondo oscuro, opaco, que no resalta ni combina las fotos “instagrameables”.

La queja no es nueva, pero sí su escala. Las filas de visitantes, las modelos improvisadas cambiándose de ropa en carpas montadas frente a las casas, las bengalas de humo para “la foto perfecta” y hasta una sesión fotográfica pornográfica hicieron colapsar la paciencia de los vecinos. En una carta enviada puerta a puerta, una agrupación resumió el sentimiento compartido: “No somos un museo. Somos una calle residencial”.

Diversas cuadras del barrio londinense se caracterizan por tener las fachadas de sus casas pintadas de diferentes colores

“El turismo aumentó después de la cuarentena. De repente, aparecimos en alguna lista viral de influencers. Y todos vinieron, como moscas a la miel”, relató un residente al medio The Standard. “Nos sentimos tristemente obligados a pintar las casas de negro. Hay gente posando desde las siete de la mañana hasta después del anochecer, subiéndose a las barandas de las casas, intentando entrar, pidiéndonos que volvamos a cerrar la puerta porque estamos arruinando su foto”, contó.

La ironía es que el principal atractivo de esta calle, sus casitas de colores, fue precisamente lo que la convirtió en imán de turistas y generadores de contenido.

Pero ese mismo encanto, sin límites ni control, hoy amenaza con desdibujar la tranquilidad de quienes viven ahí hace años. Algunos incluso aseguran que ya no pueden alquilar sus casas, porque los visitantes colman las veredas y hacen imposible acceder a las viviendas. “Parece Oxford Street”, se quejan, comparándola con una de las calles más transitadas de Londres.

Notting Hill

Otros no ocultan su enojo por haber sido convertidos, sin pedirlo, en una atracción marcada en Google Maps y Apple Maps. “No tenemos las instalaciones para atender al turismo de masas. Hay casas así por todo el oeste de Londres. No sé por qué vienen solo acá”, se lamenta un vecino.

Ahora, la estrategia es colectiva: iniciaron una campaña para que todos los propietarios de la calle pinten sus casas de colores apagados o directamente negro. “Este color no se ve bien en Instagram. Por eso queremos cambiar toda la calle”, dijeron. Lo que antes era un arcoíris para las redes, hoy busca transformarse en sombra.

La lluvia, que es el enemigo habitual del turismo londinense, ahora es celebrada en Notting Hill. “Si llueve, no vienen”, festejan los vecinos.

Diversos vecinos abandonaron su anterior fachada luminosa con la esperanza de que las paredes negras sean menos fotografiables
Los vecinos pusieron carteles en las calles para pedir que los turistas sean considerados con los residentes

La concejala Kim Taylor-Smith, vicepresidenta y miembro principal de cultura del Distrito Real de Kensington y Chelsea, declaró al medio inglés: “Notting Hill es uno de los barrios con más encanto de Londres, por no decir del país. Tiene un carácter único, con el mundialmente famoso mercado de Portobello, excelentes negocios locales, gente maravillosa y, por supuesto, edificios de gran belleza”.

“Nos encanta recibir visitantes de todo el mundo, pero les pedimos que sean respetuosos con la gente que vive aquí. Notting Hill no es solo un destino turístico, también es una comunidad, y los edificios son residencias privadas”, expresó.