Gran Bretaña votaba este jueves en las elecciones locales y una parlamentaria, que se han transformado en la gran prueba electoral para el primer ministro laborista Sir Keir Starmer.
La mayor amenaza al sistema bipartidario de laboristas y conservadores es Reforma (Reform UK), el partido ultraderechista de Nigel Farage, antieuropeo y amigo de Donald Trump. Reforma puede convertirse en la gran sensación en la madrugada del viernes, cuando se conocerán los resultados, tras cooptar a los conservadores desilusionados y, especialmente, a las mujeres.
En este 1 de mayo laborable en el reino por una histórica decisión de Margaret Thatcher, se elegirán seis alcaldes, 1461 concejales elegidos directamente en 23 ayuntamientos en toda Inglaterra. Más una elección en Runcorn y Helsby, en Cheshire, anteriormente ocupado por los laboristas, para reemplazar a un diputado que renunció tras pegarle a un elector.
Elecciones impredecibles
Unas elecciones impredecibles. Pero con algunas certezas. Los conservadores corren el riesgo de la extinción y sufrirán una enorme derrota. Ya no son más los tiempos de Boris Johnson y su gran victoria del 2021, especialmente en las zonas rojas laboristas.
Votantes se dirigen a sufragar en Ormskirk. Foto: EFE
La novedad es Nigel Farage y los liberales demócratas, que le harán frente y capitalizarán el voto de laboristas enojados. Reforma puede anular una mayoría laborista de 15.000 votos. Pero los sondeos proyectan una elección reñida y difícil de predecir.
Las elecciones parciales, las primeras desde las elecciones generales del año pasado, se desencadenaron cuando Mike Amesbury dimitió, tras ser condenado a prisión en suspenso por golpear a un elector. Un incidente grabado en video.
Video
El momento en que un legislador británico golpea a un votante en Cheshire, Inglaterra
Nigel Farage ha intentado restarles importancia a las posibilidades de Reforma. Pero una victoria en Runcorn sería una prueba contundente de que los votantes de las circunscripciones laboristas tradicionales se sienten tentados por el partido que él lidera.
Esta es una de las grandes preocupaciones en Downing Street. Aunque el primer ministro Starmer casi no hizo campaña por la intensidad de su agenda internacional, la guerra en Ucrania y la de tarifas con Donald Trump.
Reforma también podría obtener buenos resultados en algunas contiendas por la alcaldía. Cuatro puestos existentes (Oeste de Inglaterra, Cambridgeshire y Peterborough, North Tyneside y Doncaster) se disputan, junto con dos nuevos en Greater Lincolnshire, Hull y East Yorkshire.
Nigel Farage de campaña con su candidata Andrea Jenkyns. Foto: AP
La exdiputada conservadora y ahora candidata de Reforma, Andrea Jenkyns, es la favorita para ganar la alcaldía de Greater Lincolnshire. El partido de Nigel Farage también espera tener éxito en Hull y East Yorkshire.
Los riesgos para laboristas y tories
Las elecciones también podrían tener repercusiones significativas para otros partidos. Los Conservadores se preparan para perder cientos de concejales, en parte debido a su excelente desempeño en 2021, cuando se disputaron los mismos escaños por última vez, en medio del breve impulso de la “rebote de vacunas” de Boris Johnson.
Una noche particularmente mala podría ejercer nueva presión sobre el liderazgo de Kemi Badenoch, que podría tener que renunciar como jefa de los conservadores y la primera de la minoría negra en llegar a ese cargo. Ya se pelean por reemplazarla.
Día de sol en Gran Bretaña para votar. Foto: EFE
Los Demócratas Liberales y los Verdes esperan obtener avances. Pero también se muestran cautelosos ante un posible avance de Reforma.
Fuentes del partido Reforma insisten en que el objetivo principal de estas elecciones locales es demostrar quién, entre ellos y los conservadores, tiene las mejores posibilidades de enfrentarse al Partido Laborista en el llamado “muro rojo” del borde de Inglaterra, donde los Tories ganaron con Boris Johnson y en estos comicios está en juego.
La gran discusión de las últimas semanas fue una alianza entre Reforma y los Tories. Pero Farage, un ex operador de la City que empobreció y volvió a ser millonario gracias a su amistad con Trump, oficialmente no quiere esta alianza. Aunque algunos concejales Tories de facto la han hecho.
Las ciudades a observar
Más allá de Runcorn, Reforma afirma que esta disputa por el muro rojo significa ganar en dos zonas: Doncaster, donde se disputa la alcaldía por elección directa junto a cada escaño del consejo y Durham, que dio la mayor sorpresa de las elecciones locales de 2021, cuando el Partido Laborista perdió el control por primera vez en un siglo.
Un grupo fuerte y consolidado de concejales independientes en Durham hace improbable una mayoría del Partido Reformista allí. Pero podría consolidarse como el partido más grande.
Esto deja a Doncaster con las mejores posibilidades del Partido Reforma de ganar la alcaldía y la mayoría del consejo, donde los tres diputados locales son laboristas, incluido Ed Miliband, secretario de Energía.
En el noreste, el Partido Laborista tiene mucha más confianza en convertirse en el partido más grande de Northumberland y ganar la alcaldía de North Tyneside.
En la autoridad combinada del oeste de Inglaterra, un área que abarca a aproximadamente un millón de personas, el Partido Laborista también esperaría obtener la victoria en la carrera por la alcaldía. Pero el arresto de Dan Norris, actual alcalde laborista y diputado por el noreste de Somerset y Hanham, bajo sospecha de violación y delitos sexuales contra menores, complica aún más el panorama.
La decisión está en manos de los 13 millones de británicos que se han registrado para votar.