El juez Eduardo Rodríguez Da Cruz dispuso este miércoles la prisión preventiva por 90 días de su colega federal de Rosario Marcelo Bailaque que está imputado en causas donde se investigan sus vínculos con un contador de un narco y un ex funcionario de la AFIP que arreglaba deudas impositivas. La medida incluye un embargo de 1.500 millones de pesos sobre sus bienes, informaron a Clarín fuentes judiciales. Además, se le bloquearon todas las cuentas bancarias al juez Bailaque.
Pero Bailaque tiene inmunidad de arresto hasta que el Consejo de la Magistratura de la Nación, que preside Horacio Rosatti, eventualmente lo suspenda en un proceso de juicio político.
Ante esta situación la comisión de Acusación del Consejo de la Magistratura retrasó su reunión de este martes para el miércoles a fin de recibir el video de la acusación contra Bailaque y luego realizar un plenario extraordinario para eventualmente iniciar el juicio político y quitarle los fueros.
Junto al caso de Bailaque, el mércoles se tratará el caso del juez del Tribunal Oral Federal de Mar del Plata, Martín Poderti, acusado por el supuesto robo de monedas de oro de una causa.
Antes, el fiscal federal Diego Velasco, que está a cargo de la Procelac contra el lavado de dinero, pidió que Bailaque quede preso en una audiencia oral y pública porque había riesgo de que entorpeciera la investigación con su poder.
El mes pasado, la Cámara Federal de Casación Penal decidió una cuestión procesal que definió la situación judicial del juez federal de Santa Fe Bailaque e, indirectamente, de su colega Gastón Salmain, investigados en un supuesto entramado de corrupción donde se mezclan narcos, ex funcionarios de Agencia de Recaudación y Control Aduanero (ARCA) y financistas.
El máximo tribunal penal –después de la Corte- resolvió que el caso sea investigado bajo el sistema penal acusatorio, que se implementó en mayo del año pasado en Rosario y no bajo el sistema escrito que aún funciona en una parte del país, pero no en Santa Fe.
La defensa de Bailaque reclamaba que se haga bajo el viejo código que es más lento y le permitiría al magistrado ganar tiempo mientras el Consejo de la Magistratura avanza en una denuncia por supuesto mal desempeño en su contra. En cambio, el sistema acusatorio “pone plazos y acelera los tiempos”, según las fuentes judiciales consultadas por Clarín.
El recurso casatorio estaba en la sala de Casación integrada por los jueces Carlos Mahiques, Diego Barrotaveña y Daniel Petrone y el fiscal en esa instancia es Raúl Pleé.
Bailaque está al frente del juzgado federal 4 de Rosario. Pero desde noviembre del año pasado quedó formalmente acusado por un grupo de fiscales federales de delitos como corrupción, vínculos con contadores del narcotráfico y beneficios a favor de un financista.
Entre otras medidas, Bailaque está acusado del armado de una causa contra dos financistas para cobrarles una coima. En ese expediente se arrepintió el ex titular de ARCA de Rosario y Santa Fe Carlos Vaudagna.