Cristian Medina se va de Boca en un final triste pero feliz para la tesorería del club, que recibirá una cifra millonaria producto de su salida. El joven mediocampista de 22 años, quien hasta hace unos meses era considerado como una de las figuras del equipo, con contrato hasta 2026, estaba en conflicto desde octubre por una negociación fallida por su pase al Fenerbahce. Primero se negó a jugar un partido y luego fue “colgado” debido a su actitud. Ahora, la novedad es que el futbolista surgido de las inferiores ejecutará la cláusula de resicisión y quedará libre a cambio de un pago de 15 millones de dólares, limpios y en un pago, para la institución.