WASHINGTON.- El presidente norteamericano, Donald Trump, exigió el lunes que los controladores aéreos regresaran al trabajo después de que muchos empezaran a ausentarse por no recibir sus salarios debido al prolongado cierre del gobierno norteamericano, causando estragos en el transporte aéreo nacional. El cierre, no obstante, podría estar llegando a su fin.
“¡Todos los controladores de tráfico aéreo deben regresar al trabajo, AHORA!!! Quienes que no lo hagan tendrán una importante reducción de sueldo», amenazó el mandatario en su plataforma Truth Social.
“Si desean abandonar el servicio en un futuro cercano, por favor no duden en hacerlo, ¡sin pago ni indemnización de ningún tipo! Serán reemplazados rápidamente por verdaderos patriotas”, añadió el magnate.
Siendo considerados trabajadores esenciales, los controladores aéreos se han visto forzados a trabajar sin recibir sus salarios desde que se agotaron los fondos federales el 1° de octubre.
Sin embargo, el Senado norteamericano se encaminó a última hora del domingo a poner fin al “shutdown”, el más largo en la historia del país, después de que un grupo de demócratas moderados cediera en las negociaciones y acordara con el oficialismo para financiar a la administración federal hasta por lo menos el 30 de enero.
De momento no está claro cuándo es que los legisladores llevarán a cabo las votaciones finales sobre la iniciativa. Pero el presidente de la Cámara de Representantes, el republicano Mike Johnson, anunció el lunes que los miembros de la cámara baja empezarían a llegar a Washington “a partir de este momento”.
“La pesadilla finalmente está llegando a su fin”, dijo Johnson después de que el Senado votara 60-40 para considerar un proyecto de ley para financiar el gobierno.
“Tenemos que hacer esto lo más rápido posible”, declaró en conferencia de prensa el republicano, que ha mantenido a la Cámara de Representantes fuera de sesión desde mediados de septiembre cuando el recinto aprobó una iniciativa para mantener financiando el gobierno.
No obstante, el fin del cierre podría demorar aún varios días en caso de que algún senador objete o prolongue el proceso.
El cierre ha provocado escasez de controladores aéreos que, al igual que otros empleados federales, no han recibido sueldo durante semanas.
La semana pasada, el director de la Administración Federal de Aviación (FAA), Bryan Bedford, afirmó que entre el 20% y el 40% de los controladores no se presentaban a trabajar diariamente en los 30 aeropuertos más grandes de Estados Unidos desde que comenzó el cierre.
Los problemas de personal se agravaron durante el fin de semana y el sábado fue el peor día en cuanto a personal desde que comenzó el cierre del gobierno, declaró el domingo el secretario de Transporte, Sean Duffy.
Las aerolíneas cancelaron el lunes más de 1660 vuelos en Estados Unidos, y se prevé que la situación empeore esta semana después de que la FAA ordenara recortes de vuelos que aumentarán al 10% para el viernes.
Según FlightAware, un sitio web de seguimiento de vuelos, a las 13.30 hora central (10.30 en la Argentina) del lunes habían sido cancelados alrededor de 1666 vuelos y 3300 habían sido retrasados. El domingo no partieron 2950 vuelos y casi 10.800 sufrieron aplazamientos, en el peor día de interrupciones de vuelos desde que comenzó el cierre del gobierno el 1 de octubre.
La FAA anunció a última hora del domingo la suspensión del tráfico de aviación general en 12 aeropuertos con problemas de personal de control aéreo, entre ellos Chicago O’Hare y Reagan Washington National.
La FAA ordenó a las aerolíneas que redujeran el 4% de los vuelos diarios a partir del viernes en 40 de los principales aeropuertos por motivos de seguridad en el control del tráfico aéreo. Las reducciones de vuelos deberán alcanzar el 6% el martes y llegar al 10% el 14 de noviembre.
Una de las grandes preguntas que se hacen las compañías aéreas es cuándo levantará la FAA los recortes de vuelos exigidos por el gobierno. El secretario de Transporte indicó que lo primero que quiere es que mejore la dotación de personal de control del tráfico aéreo y los datos sobre seguridad.
Agencias AFP y Reuters