Israel lanzó este martes una amplia ofensiva terrestre en Ciudad de Gaza, con intensos bombardeos que dejaron decenas de muertos y miles de desplazados. La operación se produce tras el respaldo explícito de Estados Unidos a su objetivo de erradicar a Hamas, pese a la alarma internacional por el costo humano del conflicto.
Las autoridades locales informaron que al menos 37 personas fallecieron en el enclave, mientras que el ejército israelí aseguró haber atacado posiciones del movimiento islamista tanto en la capital como en Jan Yunis, en el sur.
Testimonios recogidos en el terreno, y replicados por agencias de noticias como AFP y Reuters, describieron escenas de cuerpos bajo los escombros y familias enteras huyendo hacia el sur en medio de la devastación.
El ministro de Defensa israelí, Israel Katz, declaró que la ciudad “está en llamas” y que las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) “golpean con puño de hierro la infraestructura terrorista”. Según mandos militares, las tropas avanzan hacia el centro de la urbe, donde aún se calcula que resisten unos 3.000 combatientes de Hamas.
La ofensiva coincide con la publicación de un informe de la Comisión Internacional Independiente de Investigación de la ONU, que acusó a Israel de cometer un “genocidio” en Gaza y señaló la responsabilidad del primer ministro Benjamin Netanyahu y otros dirigentes. Israel rechazó las conclusiones por considerarlas “falsas y sesgadas”.
El alto comisionado de la ONU para los Derechos Humanos, Volker Türk, advirtió que se acumulan pruebas de crímenes graves y reclamó el fin de la “carnicería” que se vio intensificada tras los ataques de octubre de 2023.
El secretario general de Naciones Unidas, António Guterres, denunció que la situación es “moral, política y legalmente intolerable” y criticó la negativa de Israel a abrir negociaciones de paz.
En Bruselas, la Unión Europea anticipó que evaluará sanciones, mientras que el Reino Unido calificó el asalto de “imprudente y atroz” y exigió un alto el fuego inmediato por parte de ambos bandos.
Desde Washington, el jefe de la diplomacia estadounidense, Marco Rubio, reiteró el “apoyo inquebrantable” a Israel, aunque reconoció que solo queda “una ventana muy breve” para alcanzar un acuerdo de alto el fuego. Más tarde viajó a Qatar, país que Estados Unidos considera clave para mediar en una eventual negociación.
La guerra se mantiene desde el ataque de Hamás en Israel el 7 de octubre de 2023, en el que murieron 1.219 personas y 251 fueron secuestradas. Según el Ministerio de Salud de Gaza, más de 64.900 civiles perdieron la vida desde entonces, cifras que la Organización de las Naciones Unidas considera fiables.
Con información de AFP y Reuters