Pagaron $44 millones por una hembra Brangus

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Con el tradicional Brangus Show, la Asociación Argentina de Brangus cerró este miércoles su participación en la 137a. Exposición Rural de Palermo. Tras la entrega de premios, un remate se realizó en el Salón Rojo del predio y convocó a criadores, compradores y cabañeros de distintas provincias. Según destacaron desde la Asociación, se lograron precios “muy destacados” y una dinámica ágil de ventas que dejó conforme al sector.

El valor más alto de la noche fue para el 50% de una hembra, que se vendió en 44 millones de pesos. Se trata del Lote 1, Tercera Mejor Hembra de la Exposición Rural de Palermo, propiedad de la cabaña Pozo de la Carreta, de la familia Gilotaux. El comprador fue la dupla compuesta por Andrés y Jorge Moutous. Si bien no se trató de uno de los grandes campeones, fue la venta más destacada de la jornada.

“No hubo récord, pero es un excelente precio: 44 millones por la mitad de una hembra. Es un número muy fuerte”, dijo Manuel Mateo, gerente general de la Asociación Argentina de Brangus, en diálogo con LA NACION. Según dijo, ni el Gran Campeón Macho ni la Gran Campeona Hembra salieron a venta: “Se los quedaron sus propietarios”.

Además del vientre premiado, se subastaron paquetes de embriones con un valor promedio de $2.340.000 por unidad. También se vendieron 770 dosis de semen con precios que oscilaron entre los $10.000 y los $108.000 por pajuela, y un promedio general de $43.000.

Mauricio Groppo, presidente de Brangus habló en el Brangus Show

En el caso de los toros, se vendieron cuatro ejemplares, con un precio máximo de $18 millones, un promedio de $13.625.000 y un mínimo de $8 millones. En las vaquillonas, al 50%, se registró un promedio de $24 millones y un piso de $13 millones.

El remate estuvo a cargo del martillero Iván O’Farrell y se destacó por su agilidad y dinamismo. “Fue un remate rápido, con buenos promedios. El sector sigue muy en auge, muy en puja”, señaló Mateo.

El gerente también explicó que el modelo de negocios dentro de la raza está cambiando: “Lo que está pasando es que muchos criadores están vendiendo en sus propios remates, no tanto en lo que es La Rural. Este año Brangus tiene 116 remates auspiciados. El año pasado fueron casi 100, así que hemos crecido bastante”.

En ese sentido, Palermo se mantiene como una gran vidriera para mostrar la genética de punta, pero no siempre como centro de operaciones comerciales. “Últimamente, se viene más a competir, a mostrarse, a estar. No todos venden aquí. Cada uno tiene su estrategia”, resumió Mateo. En esta edición, Brangus compitió con 133 animales de 68 expositores.