NUEVA YORK.- El exdirector de inteligencia de Venezuela Hugo Armando Carvajal se declaró culpable el miércoles de los cargos de narcotráfico y narcoterrorismo ante un tribunal federal estadounidense, informó el departamento de Justicia, una semana antes de que comenzara su juicio en un tribunal federal de Manhattan.
Conocido como “El Pollo”, Carvajal, de 65 años, fue en su día uno de los hombres más poderosos de Venezuela bajo la presidencia de Hugo Chávez.
Fue el jefe de la Dirección de Inteligencia Militar (DIM) de Venezuela entre 2004 y 2011, bajo el gobierno de Chávez, y entre 2013 y 2014, bajo el gobierno de Nicolás Maduro.
Quien fuera uno de los hombres fuerte del chavismo, fue extraditado a Estados Unidos en 2023 desde España, donde se había instalado, tras pasar más de una década prófugo de las autoridades estadounidenses, incluido un fallido arresto en Aruba mientras representaba al gobierno de Maduro.
Carvajal se declaró culpable de conspiración para importar cocaína a Estados Unidos, de participar en narcoterrorismo en beneficio del grupo guerrillero Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) y de delitos relacionados con armas, según un comunicado del departamento de Justicia.
Así, asumió su culpa para los cuatro cargos penales que se le atribuyen, en una imputación que lo acusa de encabezar un cártel compuesto por altos oficiales militares venezolanos que intentaron “inundar” Estados Unidos con cocaína.
Tras su detención, en 2022 Carvajal afirmó que el chavismo enviaba dinero a la Argentina y a otros países de América Latina y Europa durante las presidencias de Chávez y Maduro para financiar de manera ilegal candidaturas electorales y partidos políticos, y también “a grupos violentos y extremistas”.
“No sabe nada Argentina que hasta detenidos hubo y se incautaron 800.000 dólares por una mala coordinación con el aeropuerto”, detalló entonces Carvajal desde la cárcel de Estremera, en las afueras de Madrid, en referencia a un episodio en el Aeropuerto Jorge Newbery el 4 de agosto de 2007, que según la Justicia argentina, el entonces presidente Néstor Kirchner buscó ocultar. “Lo que no quieren que se sepa es que ése era el viaje número veintiuno que se realizaba”, agregó el venezolano.
“La declaración de culpabilidad de hoy demuestra nuestro compromiso de exigir responsabilidades a los funcionarios extranjeros que abusan de su poder para envenenar a nuestros ciudadanos”, declaró el fiscal estadounidense Jay Clayton, citado en el comunicado.
Carvajal “probablemente pasará el resto de su vida en una prisión federal”, indicó el director en funciones de la Administración de Control de Drogas (DEA), Robert Murphy.
En una carta esta semana al abogado defensor, los fiscales dijeron creer que las pautas federales de sentencia exigen que Carvajal, de 65 años, cumpla un mínimo obligatorio de 50 años de prisión.
El comunicado detalla que Carvajal participó en actos violentos, incluidos secuestros y asesinatos, para facilitar el tráfico de cocaína.
El diario Miami Herald reportó que el exfuncionario se declaró culpable en el marco de “un acuerdo que deja abierta la posibilidad de que coopere con las fuerzas de seguridad a cambio de una sentencia reducida”.
Citando fuentes conocedoras del caso, el diario agregó que Carvajal se ofreció a proporcionar a las autoridades estadounidenses documentos y testimonios que implican a Maduro y a otros altos funcionarios venezolanos “en una serie de actividades ilegales, desde el tráfico de drogas y el fraude electoral hasta operaciones de espionaje y el armamento de bandas”.
El abogado de Carvajal, Robert Feitel, dijo que los fiscales anunciaron en el tribunal este mes que nunca le extendieron una oferta de declaración de culpabilidad a su cliente ni intentaron reunirse con él.
“Creo que eso fue un error enorme”, dijo Feitel, y declinó hacer más comentarios. “Tiene información que es extraordinariamente importante para nuestra seguridad nacional y las labores policiales”.
Aunque Carvajal carece de poder desde hace años, sus simpatizantes dicen que puede proporcionar información que podría ser valiosa sobre el modus operandi de la expansión de la banda venezolana Tren de Aragua en Estados Unidos, al igual que sobre las actividades de espionaje de los gobiernos de Cuba, Rusia, China e Irán, todos aliados de Maduro.
Además podría estar tratando de atraer la atención de Trump con información sobre Smartmatic, una empresa de tecnología electoral. Uno de los subordinados de Carvajal desempeñó un papel importante en la autoridad electoral de Venezuela cuando esa compañía iniciaba operaciones.
Smartmatic, con sede en Florida, dice que su negocio global fue diezmado cuando Fox News transmitió afirmaciones falsas de aliados de Trump de que ayudó a manipular las elecciones estadounidenses en 2020. Uno de los fundadores venezolanos de la empresa fue acusado posteriormente en Estados Unidos, en un caso de soborno relacionado con su trabajo en Filipinas.
Gary Berntsen, un exfuncionario de la CIA en América Latina que supervisó comandos que cazaban a Al Qaeda, envió una carta pública esta semana a Trump, en la cual instó al Departamento de Justicia a retrasar el inicio del juicio de Carvajal, de forma que las autoridades puedan interrogar al exjefe de inteligencia.
“No es un ángel, es un hombre muy malo”, expresó Berntsen en una entrevista. “Pero necesitamos defender la democracia”.
“El Pollo” asesoró a Chávez durante más de una década. Posteriormente rompió con Maduro -el sucesor elegido por Chávez- y brindó su apoyo a la oposición política respaldada por Estados Unidos, en un llamativo cambio de posición.
En una grabación realizada desde un lugar no revelado, Carvajal exhortó a sus antiguos compañeros militares a rebelarse, un mes después de que surgieron protestas masivas en las que se exigía reemplazar a Maduro con el legislador Juan Guaidó, quien encabezaba la Asamblea Nacional, elegida democráticamente. El primer gobierno de Trump reconoció a Guaidó como gobernante legítimo de Venezuela.
La esperada revuelta en los cuarteles nunca se concretó, y Carvajal huyó a España. En 2021 fue capturado mientras se ocultaba en un apartamento de Madrid, luego de que hizo caso omiso de una orden de extradición española y desaparecer.
Caracas y Washington no mantienen relaciones diplomáticas desde 2019. Estados Unidos ha impuesto sanciones económicas y un embargo petrolero al país sudamericano.
Agencias AFP, AP y Reuters