La economía tuvo un crecimiento de 5,8% en el primer trimestre del año, respecto de igual período de 2024, apuntalada por un aumento de 31,8% en la inversión y 11,6% en el consumo privado. Si se compara contra los tres meses previo, en tanto, tuvo un leve avance de 0,8%.
El dato fue publicado por el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec), en su Informe de avance del nivel de actividad. Allí también indicó que en la comparación interanual hubo crecimiento de las exportaciones (7,2%), pero un incremento mucho mayor de las importaciones (42,8%), algo que afecta la balanza comercial.
El ministro de Economía, Luis Caputo, destacó el crecimiento en su cuenta de la red social X y enfatizó: “Todo esto en un contexto de colapso de la inflación y recomposición de precios relativos. Sin defaults, sin romper contratos y con un Banco Central capitalizado”.
Entre los sectores, el que más suba interanual tuvo fue Intermediación financiera (27,2%), seguido por Pesca (11,6%), Hoteles y restaurantes (9%), Comercio (7,3%), Explotación de minas y canteras (6,6%), y Construcción (6%). Un impulso menor tuvieron Industria manufacturera (5,1%), y Agricultura, ganadería, caza y silvicultura (3,7%).
La economista Natacha Izquierdo, directora de Operaciones de la consultora Abeceb, destacó que el crecimiento estuvo liderado por un rebote generalizado en sectores claves de la actividad. “La industria manufacturera, la construcción y el comercio consolidaron su recuperación, mientras que actividades intensivas en servicios, como hoteles y restaurantes y la intermediación financiera mostraron un dinamismo inusual, asociado al reordenamiento económico y a la recomposición del consumo”, analizó.
El dato más relevante, según Izquierdo, es la suba de 31,8% en la Formación Bruta de Capital Fijo (inversión), impulsada por un salto en maquinaria y equipos (+48,9%) y transporte (+74,7%), con fuerte predominio de bienes importados.
Para la economista de Abeceb, esta expansión de la inversión “no se explica por un rebote técnico, sino por una señal clara de recomposición del capital productivo, es decir, empresas que estaban a la defensiva comienzan a tomar decisiones estratégicas para crecer, anticipando un ciclo más estable”. Y agregó: “El crecimiento no es homogéneo ni resuelve todas las fragilidades, pero los datos confirman que el punto de inflexión ya quedó atrás y que la economía real empieza a recuperar su pulso”.
El economista Claudio Caprarulo, director de la consultora Analytica, calificó el dato como “una buena noticia”, pero advirtió que hay varios aspectos a considerar en el análisis. “Por ejemplo, la comparación anual es versus el peor trimestre del 2024 y, al analizar por sector, solo 4 de 10 se recuperaron completamente de la contracción del año pasado. Al mismo tiempo, respecto al periodo de octubre a diciembre hay una marcada desaceleración en la recuperación”, explicó el economista.
El dato más positivo, para Caprarulo, es la fuerte suba de la inversión, motorizada entre otras cosas por el salto en la importación de maquinaria y equipo importado.
El economista Camilo Tiscornia subrayó que en la comparación interanual se vio un poco menos de crecimiento de lo que arrojaba el Estimador Mensual de Actividad Económica (EMAE), que daba 6,1%. “Además, cuando se ve el desestacionalizado, se observa que daba 1,5% de aumento y ahora el Indec informó un avance de 0,8%. Seguramente, la semana próxima cuando se publique el EMAE, habrá cierta corrección”, explicó.
De todos modos, Tiscornia afirmó que lo interesante de este informe del Indec es el crecimiento de 2,1% trimestral desestacionalizado del consumo privado. “Este es el dato más importante de consumo, por lo que termina con la duda sobre si crece o no crece. Además, el nivel al que llegó el consumo privado desestacionalizado es récord histórico, al superar los máximos de 2017 y 2018”, dijo el especialista.
Tiscornia agregó que hay una gran disparidad entre las distintas ramas del consumo, lo que puede generar dudas sobre su evolución, pero lo real es que globalmente el nivel es récord. Y destacó: “Otro aspecto a considerar es que también las exportaciones alcanzaron un nivel histórico en términos de volumen, lo que sugiere que esa fuerte suba del consumo se trasladó en parte a mayores compras externas”, concluyó el economista.
El economista Federico González Rouco, de la consultora Empiria, dijo que lo sorprendió por lo bajo el 0,8% intertrimestral desestacionalizado. “Esto muestra que desaceleró el crecimiento. Pero, por otro lado, hay que remarcar que consumo e inversión están muy bien, creciendo 2,9% y 9,8%, respectivamente”, dijo.
La visión de González Rouco es que la economía tuvo un muy buen segundo tramo de 2024, pero ahora le cuesta seguir ese ritmo. “En parte es lógico. Está recuperando, pero a un ritmo lento. No caemos, pero la recuperación fuerte no llega”, concluyó el economista.
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