La historia de los autos y el cine data desde hace muchísimos años. Parecen ser complementos perfectos, donde algunas cintas cinematográficas no hubiesen logrado ser tan recordadas en el tiempo si no fuese por algunos modelos legendarios que participaron en ellas. Y al mismo tiempo, la inclusión de los vehículos en las películas genera que estos se vuelvan mucho más conocidos, construyendo su propia mística.
Hay muchas cintas con persecuciones a toda velocidad, derrapes, giros bruscos y competitividad entre dos o más autos a flor de piel. “The French Connection” (1971) tiene algunos fans, al igual que otros clásicos como “Ronin” (1998) o “Vanishing Point” (1971).
Por supuesto, tampoco se puede dejar de mencionar a la franquicia “Rápido y Furioso” (2001- actualidad), aunque por supuesto mucho más exagerada y con tintes de ciencia ficción. No por ello deja de ser menos impresionante la escena de la quinta entrega de la saga donde dos Dodge Chargers arrastran una bóveda de banco por las calles de Río de Janeiro.
Sin embargo, si bien cada una de las mencionadas son recordadas y entretenidas, hay una que dio lugar a una variante del Ford Mustang. Se trata de “Bullitt” (1968), una película protagonizada por Steve McQueen sobre un detective en San Francisco con el nombre de Frank Bullitt.
Tiene una duración de 113 minutos, pero se luce en el momento que el personaje principal puede conducir su Mustang Fastback de 1968 en una persecución con un Dodge Charger del mismo año por las calles de San Francisco. Afortunadamente, toda la secuencia ya se encuentra en YouTube en alta calidad, gracias a que lo subieron desde la cuenta de Warner Bros, titulares de los derechos.
La persecución dura unos 10 minutos, con saltos dramáticos por las onduladas calles, giros bruscos con los autos derrapando y música permanente de suspenso, pero sin tapar el rugir de los motores.
Todo comienza en la ciudad, en un entorno sumamente urbano y con el protagonista a la caza, pero a medida que pasan los minutos comienzan a desplazarse hacia la ruta, donde se da el espectacular cruce con una motocicleta de frente y el Mustang gira hacia la tierra y busca estabilidad, en una toma muy valorable considerando la época de su filmación.
Como es de esperarse en todas estas escenas del tipo, finaliza con una gran maniobra del protagonista y una tremenda explosión.
Por supuesto, si se quiere disfrutar de todo el arco argumental para poder entender mejor la persecución es recomendable ver la película, que para la Argentina se encuentra disponible en la plataforma Apple TV (también se la puede alquilar en YouTube o Google Play Películas).
Finalmente, según cuenta el medio especializado Car and Driver, hay posibilidades de una secuela del film en el que se apostaría por Bradley Cooper para el rol protagónico, pero sin conversaciones oficiales o anuncios de pre-producción.
Zurueta, Inaki (Redacción)
En 2020, el Ford Mustang GT de 1968 manejado por McQueen en la película fue vendido por la cifra récord de US$3,4 millones en Kissimmee, Florida, EE.UU, según informó en su momento la firma de subastas Mecum.