Mientras Colapinto come un asado con el hijo de Briatore en Mónaco, qué dice Doohan sobre su final anunciado en Alpine

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Al final, Franco Colapinto no estará presente en el Gran Premio de Miami ni como titular ni como reserva, y se prepara para su posible regreso a la Fórmula 1 que tendría lugar en la fecha que sigue, en Imola. A falta de confirmaciones, el argentino disfruta de unos días de descanso en Mónaco, donde compartió un asado con el hijo de Flavio Briatore, mientras que el dueño de la butaca en Alpine sigue siendo Jack Doohan, que debe lidiar con una temporada muy mala en rendimiento y la insistente presión de todo el Gran Circo sobre sus espaldas.

Aunque el australiano se mostró firme ante las adversidades y aseguró que la presión no afecta su rendimiento. “Realmente no he tenido problemas con la presión en absoluto”, declaró en la página oficial de la F1. Y aclaró: “Obviamente hubo momentos como en Australia y en Japón donde se podría decir que estuvieron relacionados a la presión, pero siendo completamente honesto, no fue así”. En Australia no terminó la carrera y en Japón sufrió un gravísimo accidente durante los entrenamientos libres que le costaron 1.5 millones de dólares a la escudería.

Pero aparte de arreglar su auto, Alpine trabaja duro para quitarle toda esa presión de encima a Doohan. “El equipo hizo un gran trabajo para sacar eso del camino, sobretodo internamente, lo que fue bueno”, dijo. Para contrarrestar el ruido exterior, el australiano se enfoca en ganar confianza.

“Sé que el ritmo ha estado ahí desde el principio, así que eso también es una confianza interior que puedo llevar conmigo”, expresó. “Mi confianza en este paddock, dentro del coche, trabajando con el equipo ha crecido -reforzó-. Sigo aprendiendo a optimizar mi paquete y también nuestra unidad de potencia. Sigo aprendiendo con cada vuelta, pero cada vez tengo más confianza“.

Ese ritmo todavía no se logra ver dentro de la pista, considerando que es uno de los pocos pilotos que todavía no consiguió sumar puntos en lo que va de la temporada junto a Gabriel Bortoleto, Liam Lawson y Fernando Alonso. Su mejor resultado fue el 13° puesto en China -beneficiado por las desclasificaciones de las Ferraris y de su compañero Gasly, que no pasaron las técnicas-, mientras que en la última carrera en Arabia Saudita quedó anteúltimo.

Pero no es secreto que en la Fórmula 1 no importa solamente el rendimiento y que el apoyo económico que hay detrás de los pilotos juega un papel muy importante a la hora de decidir quién estará arriba del auto. Si bien corrían los rumores de que el australiano podría ser reemplazado por Colapinto después de las primeras cinco carreras de la temporada según su rendimiento, Ralf Schumacher, expiloto de Fórmula 1 y hermano de Michael Schumacher, reveló que Doohan tiene un patrocinador que le aporta 10 millones de euros a Alpine.

Ahora queda esperar para ver qué es más importante para el equipo y si pueden depender solo de Pierre Gasly para ganar puntos. Por el momento, el jefe de la escudería, Oliver Oakes, está muy decidido a apostar por el australiano y su desarrollo, por lo que Franco Colapinto tendrá que quedarse un rato más en el simulador.

Eso ocurrirá la semana que viene, en la sede inglesa de Alpine en Enstone. En las últimas horas, Colapinto viajó en avión privado a Mónaco, donde desde diciembre alterna su residencia con Madrid, y allí compartió un asado con Falco Nathan Briatore.

El hijo del magnate italiano compartió unas fotos este viernes en las que se lo puede ver con el piloto bonaerense y con otro argentino destacado en el deporte: el reconocido fisioterapeuta Ulises Badio, ex fisio de Novak Djokovic y actual del número 1 del ranking ATP, Jannik Sinner.