WASHINGTON.- En una contienda electoral local que los demócratas buscaron darle una proyección nacional de cara a los comicios de medio término de 2026, la candidata Eileen Higgins logró este martes una aplastante victoria para la alcaldía de Miami ante el republicano Emilio González -respaldado por Donald Trump- y le devolvió a su partido el control de la ciudad del sur de Florida tras 28 años.
Higgins -de 61 años y que además se convertirá en la primera mujer en gobernar la ciudad– obtuvo cerca del 59% de los votos en la segunda vuelta de las elecciones a la alcaldía, mientras que González, exadministrador municipal, obtuvo el 41% y reconoció su derrota. Higgins también quebró un largo dominio de alcaldes de origen hispano en la ciudad.
“La gente de Miami hizo historia. Juntos dejamos atrás años de caos y corrupción y abrimos la puerta a una nueva etapa para nuestra ciudad, una definida por un liderazgo ético y responsable que genere resultados reales para la gente“, señaló Higgins a través de un comunicado, en el que agradeció el apoyo para “ganarle a la política de siempre”.
Higgins prometió también liderar un gobierno “que finalmente se gane la confianza del público”. Para los demócratas, su triunfo resultó otro sólido desempeño una elección durante el primer año del segundo mandato de Trump, cuyo Partido Republicano ya había sufrido otros reveses recientes, como en los estados de Virginia y Nueva Jersey.
Aunque la contienda fue técnicamente no partidista, la división política fue clara. Trump respaldó a González, mientras que el Comité Nacional Demócrata y los posibles aspirantes presidenciales del partido apoyaron a Higgins.
Los votantes habían manifestado su deseo de cambio en la primera vuelta de las elecciones el 4 de noviembre pasado, lo que llevó a Higgins (36% de los votos), excomisionada del condado de Miami-Dade, y a González (19%) a la segunda vuelta del martes. Ambos candidatos hicieron campaña con plataformas de transparencia y gobiernos eficientes luego de años de escándalos de corrupción en una ciudad controlada por dinastías políticas. El alcalde saliente es Francis Suárez, hijo del dos veces mandatario de la ciudad Xavier Suárez.
El domingo, Trump había llamado a votar por el candidato republicano a través de un mensaje en su red Truth Social. “¡Es una contienda importante! Vota por González. ¡Es fantástico!“, lo elogió.
La contienda atrajo la atención nacional, mientras los demócratas todavía intentan reconstruirse tras la dura derrota en las elecciones presidenciales de 2024 a manos de Trump. La victoria de Higgins le da al partido una nueva inyección de confianza de cara a los comicios intermedios de noviembre próximo y, a la vez, abre una puerta para empezar a recuperar terreno en el estado de Florida, que solía ser clave y muy disputado en las contiendas presidenciales, pero que en el último tiempo pasó a un sólido control republicano.
La ciudad de Miami, que tiene cerca de medio millón de habitantes y pertenece al condado de Miami-Dade, es la segunda más poblada de Florida, después de Jacksonville (un millón). Al igual que el estado, gobernado por el conservador Ron DeSantis, Miami se había vuelto más republicana en los últimos ciclos electorales, lo que generó que la amplia victoria de Higgins resultara impactante y captara la atención de los medios a nivel nacional.
“Ya no se trata de una contienda por la alcaldía, sobre quién es el mejor candidato”, había señalado Fernand Amandi, encuestador demócrata en Miami. “Es un referéndum nacional sobre el Partido Republicano versus el Demócrata”, explicó a The Wall Street Journal.
Dirigentes demócratas a nivel nacional celebraron rápidamente la rotunda victoria de Higgins. Hakeem Jeffries, líder de la minoría en la Cámara de Representantes, escribió en X: “Ningún demócrata ha sido elegido alcalde de Miami en casi 30 años. Hasta esta noche. ¡Felicitaciones a la alcaldesa electa Eileen Higgins por aplastar al candidato de Trump! A continuación vamos por los tres republicanos del sur de Florida».
“El resultado de esta noche es otra señal de advertencia para los republicanos de que los votantes están hartos de su agenda desconectada que está aumentando los costos”, analzó Ken Martin, presidente del Comité Nacional Demócrata, en un comunicado.
Hasta hace poco, Higgins, una ingeniera mecánica de profesión y exdirectora del Cuerpo de Paz en Belice, representaba lo que ella misma definía como un distrito de tendencia republicana en la comisión del condado. Fue elegida por primera vez en 2018 tras presentarse a los votantes como “La Gringa”, un término que los hispanohablantes usan para referirse a los estadounidenses blancos, debido a que muchas personas no sabían cómo pronunciar su nombre.
“Simplemente ayuda a la gente a entender quién soy, y ¿sabes qué? Soy una ‘gringa’, así que, ¿qué voy a hacer, negarlo?”, declaró en su momento a la agencia AP. Higgins, quien habla español, representó a un distrito de inclinación conservadora que incluye al barrio cubano de La Pequeña Habana.