Netanyahu defiende su plan militar para la Franja de Gaza a pesar de la presión internacional

0


TEL AVIV.– A pesar de la presión la comunidad internacional y de los llamados para poner fin a los combates en la Franja de Gaza, el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, afirmó el domingo que su nuevo plan militar para el devastado territorio “es la mejor forma de terminar la guerra” contra Hamas.

Después de 22 meses de guerra, Netanyahu enfrenta una fuerte presión en Israel por el destino de los 49 rehenes todavía en manos del movimiento islamista palestino.

Palestinos reciben ayuda humanitaria de paquetes enviados por los Emiratos Árabes Unidos en Deir al-Balah, Franja de Gaza, el 9 de agosto del 2025. Abdel Kareem Hana – AP

También recibe presiones del extranjero para que termine con la guerra en la devastada Franja de Gaza, donde más de dos millones de palestinos están amenazados de una “hambruna generalizada” según la ONU.

“Hemos completado gran parte del trabajo. Tenemos entre el 70% y el 75% de Gaza bajo control militar israelí”, declaró el dirigente durante una conferencia de prensa en Jerusalén.

Humo se eleva tras una explosión en la Franja de Gaza, vista desde el sur de Israel, el domingo 10 de agosto de 2025.Ohad Zwigenberg – AP

“Pero nos quedan todavía dos bastiones: son Ciudad de Gaza y los campos” del centro de la Franja, agregó.

Este plan “no tiene como objetivo ocupar Gaza, sino desmilitarizar Gaza”, repitió Netanyahu. “Esta es la mejor forma de terminar la guerra y la mejor forma de terminarla rápido”.

“En primer lugar, desarmar a Hamas. En segundo lugar, liberar a todos los rehenes. En tercer lugar, desmilitarizar Gaza. En cuarto lugar, Israel ejercerá un control de seguridad preponderante. En quinto lugar, una administración civil pacífica no israelí”, resumió el premier, acusado por sectores israelíes de intentar prolongar la guerra para no enfrentar en la Justicia los casos de corrupción que lo acorralan.

Netanyahu afirmó que permitirán a la población civil “abandonar con toda seguridad las zonas de combate para ir a zonas seguras designadas” y que se le entregará víveres “en abundancia”.

También prometió “corredores protegidos” para la distribución de ayuda y “aumentar el número de puntos de distribución de ayuda de la GHF”, la polémica fundación privada apoyada por Estados Unidos e Israel en cuyos puntos de distribución de la asistencia humanitaria fueron asesinados centenares de civiles palestinos.

Hablamos en términos de plazos bastante cortos porque queremos poner fin a la guerra. (…) Vamos a ganar la guerra con o sin el apoyo de otros”, aseguró, tras las críticas a su plan por parte de la comunidad internacional.

Entre los campamentos centrales de Gaza se encuentran los establecidos en Al Mauasi, que Israel describió en su día como una “zona segura” que, no obstante, también ha sido objetivo de bombardeos del Ejército israelí.

Netanyahu no ha precisado si la operación contra los campos incluirá a los comprendidos en esta zona.

El primer ministro tampoco presentó plazos sobre el proceso de expulsión previo de la población de estas zonas, donde viven más de un millón de palestinos. Fuentes próximas a la operación indican que, sea como fuere, este desplazamiento forzado debería haber terminado para octubre de este año si comienza inmediatamente, pero Netanyahu se declaró convencido de que Israel podría ocupar estas zonas en cuestión de semanas.

Palestinos desplazados caminan por un campamento improvisado junto a la playa en la ciudad de Gaza, el domingo 10 de agosto de 2025.Jehad Alshrafi – AP

“En Rafah (sur de Gaza) solo hicieron falta entre seis y ocho días, así que creo que podemos conseguir un resultado parecido”, ha aventurado. “En cualquier caso no quiero hablar de calendarios exactos, pero estamos hablando de un plazo razonablemente corto porque queremos que la guerra termine”, indicó.

Netanyahu además insistió en un futuro escenario en el que Gaza estará gobernada por una “autoridad de transición” de la que no formarán parte ni Hamas ni la Autoridad Palestina, el gobierno palestino en Cisjordania, al entender que ambas organizaciones “tienen el mismo objetivo” que es la destrucción de Israel.

Según Netanyahu, los niños palestinos en Gaza y Cisjordania “reciben la misma educación con los mismos libros de texto” y por la que la Autoridad Palestina mantiene una política de “pagar por matar” para fomentar el asesinato de judíos.

“La verdadera razón de la persistencia de este conflicto no es la ausencia de un Estado palestino, sino la persistente negativa palestina a reconocer al Estado judío dentro de cualquier frontera”, dijo antes de reiterar su negativa a dialogar sobre una situación de dos estados porque está convencido de que los palestinos seguirán “buscando la destrucción de Israel”.

“Darles un Estado independiente con todos los lujos es invitar a una guerra futura, y a una guerra segura”, concluyó.

En este contexto, Hamas reaccionó acusando a Netanyahu de “mentir”.

Sigue mintiendo, engañando y tratando de inducir a error al público. Todo lo que dijo en la conferencia de prensa constituye una serie de mentiras. Es incapaz de enfrentarse a la verdad y, en cambio, se dedica a distorsionarla y ocultarla”, declaró Taher al-Nunu, asesor de medios del jefe de la oficina política de Hamas.

España y otros siete países europeos condenaron en un comunicado conjunto el plan israelí, asegurando que podría ocasionar “una cifra inaceptablemente elevada de víctimas mortales” y “comprometer aún más la vida de los rehenes”.

Por su parte la ultraderecha israelí, que forma parte de la coalición gubernamental, expresó su desacuerdo.

“El primer ministro y el gabinete se han rendido a los débiles”, criticó el ministro de Finanzas, Bezalel Smotrich.

Manifestantes protestan frente a la sede de las Naciones Unidas mientras el Consejo de Seguridad celebra una reunión de emergencia sobre la situación en Gaza el 10 de agosto de 2025 en Nueva York.JOHN LAMPARSKI – AFP

“Quiero toda la Franja de Gaza, la transferencia [de su población] y la colonización”, añadió el ministro de Seguridad Nacional, Itamar Ben-Gvir, otra figura de la ultraderecha.

El líder de la oposición, Yair Lapid, también estimó que el plan de Netanyahu es una “catástrofe”.

“Van a movilizar a última hora a 430.000 reservistas (…) Están desmantelando el país desde dentro”, dijo a los medios.

En en terreno, la Defensa Civil de Gaza afirmó que el ejército israelí mató a 27 personas este domingo, entre ellas 11 por disparos cuando esperaban la distribución de comida.

En este contexto, decenas de miles de personas volvieron hoy a salir a las calles de Tel Aviv y otras ciudades del país y del mundo, exigiendo un acuerdo que garantice el regreso de todos los rehenes –incluidos los cuerpos de los 27 declarados muertos por el Ejército israelí– a cambio del fin de las hostilidades.

Personas con banderas y pancartas durante una «Marcha Nacional por los Rehenes» organizada por Stop the Hate UK en el centro de Londres el 10 de agosto de 2025.CARLOS JASSO – AFP

Einav Zangauker, madre de uno de ellos y una de las caras visibles de la movilización de las familias, aseguró que “el gabinete decidió el destino de los rehenes: los vivos serán asesinados y los muertos desaparecerán para siempre”.

El ataque del 7 de octubre, que desencadenó la guerra en Gaza, causó la muerte de 1219 personas en el lado israelí, en su mayoría civiles.

La operación israelí en Gaza ya ha causado 61.430 muertos, en su mayoría civiles, según los datos del Ministerio de Salud del territorio, gobernado por Hamas, considerados fiables por la ONU.

Agencias AP y Reuters