Cada campaña, los productores se enfrentan a la necesidad de tomar una gran cantidad de decisiones. Cuando se planifica el ciclo se definen insumos, tecnologías y manejos que, llegado el momento, las condiciones climáticas o de mercado pueden hacer cambiar, señala un informe de Nidera Semillas. Precisa que algo de esto ocurre con el trigo esta campaña.
“Aunque el avance de la siembra es de aproximadamente el 25% de la superficie proyectada, en varias zonas se están produciendo retrasos en comparación con el promedio de los últimos cinco años”, recuerda. “En algunos lugares vienen con la cosecha gruesa demorada o situaciones de falta de piso por el exceso de lluvias”, señala Otto Goedelmann, gerente de ventas de autógamas de la empresa. En este sentido indica que, dependiendo de cuándo se estime tener los lotes listos para sembrar, “vamos a poder determinar la elección del material a utilizar”.
“Fecha de siembra y variedad van de la mano”, dice Goedelmann. Para cada ciclo de madurez de trigo hay una recomendación de fecha de siembra óptima. “Se estima que, en promedio, por cada día que se atrasa la siembra, se pierden entre 18 y 20 kilos de trigo por hectárea. Además, cada incremento de un punto en la temperatura máxima media también puede generar una pérdida de aproximadamente 330 kilos por hectárea”, señala la empresa.
“En un escenario ideal, elegimos el material y en base a esa variedad definimos la ventana de siembra óptima. Otras veces, lo que tenemos como dato es la fecha a partir de la cual podemos ingresar al lote. En estos casos, debemos repensar la decisión y buscar el mejor material que se adapte a nuestra condición”, analiza el técnico.
Agrega: “La elección de un producto también depende de si se quiere llevar adelante un planteo ofensivo o defensivo, de acuerdo al ambiente. También si necesitamos hacer determinado manejo de malezas o cubrirnos sanitariamente de alguna enfermedad. Esto también define la elección de la variedad”, repasa Goedelmann.
Cuenta que la marca tiene un portfolio de variedades de alta performance para todos los ciclos y fechas de siembra. Entre ellos el 610 Baguette, “un material nuevo de ciclo intermedio que por su plasticidad y alto perfil sanitario promete superar en preferencias al trigo más sembrado del país, que es el Baguette 620″, dice la firma. “Tiene un requerimiento de vernalización muy bajo y excelente comportamiento, por lo que se adapta mejor a distintas regiones y ofrece mayor flexibilidad en fechas de siembra”, puntualiza el técnico.
Según la empresa, una vez definida la variedad y la fecha de siembra corresponde ajustar las cuestiones nutricionales en base a los análisis de suelo y la proyección del rendimiento. “Además de fósforo y potasio, el nitrógeno es uno de los nutrientes clave para el trigo. Y acá nutrientes y agua van de la mano”, señala la firma.
“Si planificamos que vamos a atravesar desde la cuestión hídrica un muy buen año, sería recomendable tener en cuenta una adecuada nutrición. Arrancamos con muy buenos perfiles y la proyección para primavera es de un año normal con lo cual es altamente probable que el trigo en términos generales tenga el agua que necesite para explorar máxima productividad. Esto lleva a acompañarlo con una nutrición adecuada”, afirma Goedelmann.
El técnico también recomienda iniciar las siembras con lotes libres de malezas y hacer un seguimiento que generalmente va hasta el cierre de surco. “Si llegamos a esa instancia con un lote limpio es altamente probable que no enfrentemos mayores problemas posteriores”, dice.
Agrega que respecto a insectos hay que hacer los monitoreos y estar atentos a los umbrales de control. Sobre enfermedades detalla: “Para nosotros el perfil sanitario es un driver principal porque sabemos que en trigo la cuestión sanitaria es clave. Para eso en la empresa nos manejamos con Scores, donde podemos caracterizar los materiales frente al comportamiento que tienen, sobre todo a las royas y manchas. Cuando sacamos un producto nuevo, una de las condiciones que tenemos para que llegue comercialmente al cliente es que sanitariamente tenga un comportamiento destacado y superador a lo actualmente dispone el productor”.